
Aunque el crédito es anterior a la cobranza, estas funciones son complementarias.
Si la cartera es el activo corriente más cercano a convertirse en efectivo y si las empresas valen por su capacidad para generar efectivo, sus directivos le están dando gran relevancia a la administración del crédito y la cobranza, por lo tanto el funcionario encargado de administrar la cartera ha sido elevado a la categoría de un profesional con sus responsabilidades y ética propia, con importancia y alto perfil al interior de la empresa.
Desde el punto de vista organizacional, el proceso del crédito es anterior a la cobranza, pero por el conjunto de operaciones, estas funciones son complementarias y entrelazadas por un proceso integral que permite unirlas en una sola función, por lo tanto deben ser manejadas por una sola persona.
Este funcionario debe ocupar una posición clave en la empresa ya que sus responsabilidades macros son incrementar las ventas de manera responsable mediante la aprobación de solicitudes de crédito, y recuperar el capital de trabajo en los plazos establecidos mediante estrategias de cobro modernas, como la de convertir a los clientes en socios estratégicos de la compañía.
Actualmente el riesgo de la cartera no está en los clientes, está al interior de las empresas y debe ser un propósito minimizar el riesgo de cartera. Fortalecer la gestión interna implica que el administrador de cartera tenga total respaldo de los directivos para adelantar diversas funciones:
• Establecer políticas generales sobre la coordinación del manejo operativo del crédito y la cobranza.
• Diseñar un sistema acorde con sus necesidades.
• Tener el personal necesario para la operación.
• Establecer la interconexión con las demás áreas principales y secundarias de la empresa como ventas, logística, contabilidad, caja, finanzas, servicio al cliente.
• Tener un manual de funciones y procedimientos aprobado por la gerencia y ponerlo en conocimiento a las áreas implicadas en el proceso del crédito y la cobranza para evitar manipulaciones.
• Contar al interior de la empresa con un comité de cartera funcional y dinámico, en el que estén involucradas áreas como ventas, finanzas y la alta gerencia.
• Pertenecer a comités de cartera del sector para lograr un mejor conocimiento de clientes.
En conclusión, las políticas y procedimientos utilizados para la administración del crédito, la cobranza y el riesgo en la cartera serán las variables que los empresarios con agudeza de visión financiera tendrán que considerar con el fin de orientar eficientemente la gerencia de crédito y cobranza. Así, se pretende lograr los objetivos propuestos para la empresa donde el volumen de sus ventas, el nivel de sus utilidades y la capacidad de generar efectivo dependen en gran medida de la administración de cartera.
Autor:
MAURICIO DIAZ YOUNG
COMITÉ DE TESOREROS DE LA CÁMARA DE COMERCIO DE CALI